Vamos a hablar en esta nueva entrada de un restaurante que la mayoría de Jornaleros conocerán, y muchos de ellos habrán visitado. Se trata del Mesón Cándido de Segovia, situado a los pies del acueducto.
Este establecimiento cuenta con una larga tradición, ya que nació en el año 1885. En la actualidad, los descendientes del famoso Cándido siguen ostentando su título de Mesonero Mayor de Castilla. Pero como a los Jornaleros se nos gana por el paladar y no por los títulos, vamos a entrar en materia.
El plato típico es el "Cochinillo asado al estilo de Cándido". Se trata de un plato que a los Jornaleros amantes de la carne les encantará, ya que su ternura es espectacular, lo mismo que su sabor.
Para demostrar dicha ternura, cortan el cochinillo con un plato delante de los clientes (aunque solo si se va un grupo grande), en una ceremonia con una pomposidad que hace las delicias de los turistas (especialmente de los extranjeros).
Dejando a un lado todo este circo, hemos de decir que el cochinillo es de lo más sabroso. Su textura es espectacular, desde la parte externa más "churruscada" hasta la carne del interior suave como manteca.
Ahora bien, la calidad del cochinillo del Mesón Cándido es similar a la que uno se puede encontrar en numerosos asadores castellanos. Vamos, que su fama no se sustenta hoy en día por la calidad superior de su comida, sino por su tradición y emplazamiento.
En cuanto al servicio, quizás se pase de profesional hasta resultar frío, aparte de tener ciertos problemas a la hora de asesorar a los clientes.
Por su parte, el local es un viejo Mesón castellano de la época original, si bien el interior lo han recargado de fotografías de personajes ¿ilustres? que han visitado este establecimiento.
A pesar de toda la parafernalia que tiene alrededor, es un sitio que merece la pena visitar al menos una vez, simplemente por tener esa experiencia.
Rating NVdJ: Pez verde
¡Hasta la siguiente Jornaleros!
Dejando a un lado todo este circo, hemos de decir que el cochinillo es de lo más sabroso. Su textura es espectacular, desde la parte externa más "churruscada" hasta la carne del interior suave como manteca.
Ahora bien, la calidad del cochinillo del Mesón Cándido es similar a la que uno se puede encontrar en numerosos asadores castellanos. Vamos, que su fama no se sustenta hoy en día por la calidad superior de su comida, sino por su tradición y emplazamiento.En cuanto al servicio, quizás se pase de profesional hasta resultar frío, aparte de tener ciertos problemas a la hora de asesorar a los clientes.
Por su parte, el local es un viejo Mesón castellano de la época original, si bien el interior lo han recargado de fotografías de personajes ¿ilustres? que han visitado este establecimiento.
A pesar de toda la parafernalia que tiene alrededor, es un sitio que merece la pena visitar al menos una vez, simplemente por tener esa experiencia.
Rating NVdJ: Pez verde
¡Hasta la siguiente Jornaleros!
Hace tiempo que no voy, pero mi experiencia es que el cochinillo lo bordan, no tanto el resto de platos. Es recomendable limitarse a pedir el cochinillo y alguno de los buenos postres. Para algo diferente hay mucho mejores alternativas en Segovia.
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